La Fundació Catalunya-La Pedrera nace el 1 de enero de 2013 para responder a una nueva realidad social, y hacerlo con una nueva visión.
Nuestro entorno cambia; emerge una nueva conciencia social, y emergen también nuevas necesidades y nuevas ambiciones. Por eso nos reinventamos, pero sin perder la esencia de lo que somos: una Fundación que apuesta por la ética y la innovación, que cree en la proximidad y el dinamismo, y que quiere transformar en acciones el compromiso con el territorio y con la su gente. Haciendo cosas diferentes pero, sobre todo, haciéndolas de manera diferente, y garantizando que somos, también, una entidad sostenible económicamente.
Somos nuevos y queremos ser singulares. Porque estamos al servicio de un país también singular, por la riqueza de su patrimonio natural, por la creatividad de su cultura, y por la generosidad y solidaridad de su gente. Nuestra misión es trabajar de forma proactiva para el desarrollo y la transformación social de Cataluña, situándonos junto a los que nos necesitan, a los emprendedores, a los que trabajan por el futuro, a los que crean nuevas ideas.
El edificio de La Pedrera, declarado Patrimonio Mundial de la UNESCO, es la sede y faro de la Fundación.